¿Sabías que los alumnos que toman apuntes y hacen resúmenes mejoran hasta en un 34% su desempeño académico? Y es que estudiar es una habilidad que se aprende y se desarrolla con las técnicas adecuadas y con práctica.
Desde esta perspectiva, el método Cornell es uno de los sistemas de estudio más revolucionarios, conocidos y efectivos a la hora de tomar apuntes y de aprenderlos. Por esta razón, en este artículo, te contamos en qué consiste y cómo puedes aplicarlo para ser más eficaz y obtener mejores resultados.
En los años 50, el Doctor en Psicología y profesor de la Universidad de Cornell Walter Pauk, tras realizar un exhaustivo estudio sobre cómo tomaban apuntes los alumnos de su centro, y según varias técnicas pedagógicas, desarrolló en el libro How to study in college el método Cornell: un nuevo procedimiento eficaz, rápido y sencillo para tomar apuntes.
Este sistema de estudio se caracteriza por dividir una misma hoja de apuntes en cuatro apartados. Para ello, lo primero que hay que hacer es trazar dos líneas horizontales, una en la parte superior y otra en la inferior, de manera que queden dos márgenes horizontales en ambos extremos de la hoja y una parte central. En esta zona centro de la hoja, se dibuja una línea vertical que divide la franja en dos espacios, quedando un cuarto del espacio a la izquierda y tres cuartos a la derecha.
No basta con dividir la hoja en cuatro partes, sino que es importante saber qué hay que escribir en cada espacio. A continuación, te explicamos qué debe contener cada apartado:
No obstante, el método Cornell es mucho más que un sistema para tomar apuntes y también te permite estudiarlos de una manera productiva. Y es que la misma estructura del folio ofrece la posibilidad de dejar solo visible el margen izquierdo, esto es, la columna de dudas y datos clave, para repasar toda la información y aprenderla.
De esta manera, a la hora de estudiar, puedes tapar las notas de la parte derecha e intentar responder las preguntas clave de la columna izquierda. Asimismo, si das con más cuestiones importantes, puedes ir anotándolas a medida que vas avanzando.
El método Cornell es una de las técnicas de estudio que más repercusión ha tenido en el mundo académico por las ventajas que ofrece. Algunas de ellas son:
Pese a que cada vez lo hacemos menos, hay estudios que demuestran que escribir a mano ayuda a retener mejor la información. Esto es debido a que el documento digital es uniforme y más monótono, por lo que el cerebro pierde la atención. Por el contrario, escribir a mano implica trazos irregulares, esquinas dobladas y espacios heterogéneos. Además, utilizar papel y bolígrafo nos hace ir más lento y, por tanto, disponemos de más tiempo para retener la información.
Para llevar a cabo esta estructura en los apuntes, no solo se necesita concentración, sino también una escucha activa durante todo el proceso, ya que este mismo nos obliga a estar pendientes de qué entendemos, qué no y cuál es la información clave.
Es un método ordenado que permite estructurar el contenido, lo que proporciona un marco para poder entenderlo, recordarlo y aprenderlo. Además el trabajo de síntesis requiere de comprensión y de mucha claridad de ideas.
Como puedes observar, una de las grandes ventajas que presenta este método es que condensa, ordena y sintetiza las ideas. No importa el campo de estudio, la dificultad o la situación concreta porque el método Cornell se puede aplicar a cualquier tipo de estudio e, incluso, en el entorno laboral para, por ejemplo, retener y ordenar la información de las reuniones. Y es que, como señala la psicóloga Gloria Marsellach Umbert, “saber estudiar significa saber cómo hay que pensar, observar, concentrarse, organizar y analizar, en suma, ser mentalmente eficiente”.
Sin duda, conocer cuál es tu mejor método para estudiar y ponerlo en práctica no solo facilita obtener mejores resultados, sino que también te permitirá desarrollar otras habilidades blandas, como la escucha activa o la organización, esenciales en el entorno laboral actual. Se trata de unas capacidades que adquieren cada vez más relevancia y que se necesitan para desempeñar un puesto de responsabilidad o tener una mayor empleabilidad.
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